DECLARACIÓN DE INTENCIONES / VISIÓN
Mi práctica nace desde una mirada femenina que lucha —y a veces cede— ante la omnipresencia de la mirada masculina. Una inversión sáfica donde la sexualización fluye y se redefine. Donde la atadura enfatiza lo físico y el objeto entrelazado se convierte en una extensión del cuerpo, todo enraizado en el dibujo y en la búsqueda —casi obstinada— de una línea impecable.